El caso Salinas Pliego va más allá de lo fiscal. O, dicho de otra manera: a fin de cuentas, como bien se sabe, la verdadera lucha política se relaciona con la captación y distribución del dinero. El beneficiario histórico de las prebendas se revuelve, fársico, pretendiendo mostrarse como “líder libertario”, aspirante a libertador de la nación, porque no pudo impedir que le cobraran lo que, según todos los indicios, le ordenará hacer el nuevo Poder Judicial, en específico la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
