Pese a la presión que imprimió el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, minutos antes de que se diera a conocer la decisión de política monetaria, la Reserva Federal (Fed) mantuvo las tasas de interés sin cambio y advirtió al mandatario de que sus políticas provocan “aún más incertidumbre”, lo cual ya pone en debate el doble mandato del banco central.